De lectores y escritores
De narradores y poetas
De borrachos y bohemios
De amigos y de amantes
A todos los miembros y simpatizantes de esta familia un tanto disfuncional que es la literatura, quién hizo de anfitriona,- de cabrona-, en este piano bar con rotulación extraña, donde hubo muertos que mueren varias veces, pleitos, decepciones, abandono
Y mucho licor para ahogar las penes o refrescar las alegrías.
A pesar del susto, fue bello vestirse de fiesta y vivir la vida de nuestros personajes, hablar la voz de nuestros hablantes.
La función se acabó por el momento, sólo queda esperar que llegue la próxima y llevar en el bolsillo el capítulo siguiente, sin terminar,-por supuesto-, sería inútil hacerlo de todos modos, porque la literatura está viva y se manda sola, además es una conocida adicta a los disfraces y las bromas, luego, no tiene sentido querer anticiparse, salo esperar el próximo turno, vestido de fiesta,-claro- y sonreír, sonreír, sonreírle mientras el mundo se cae a pedazos.
Felicitaciones a todos ¡¡
Muchas gracias por el trabajo que volvió menos pálidas a las páginas de la historia de este piano bar
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